8 Formas de ahorrar dinero al comprar un coche nuevo sin renunciar a la calidad
Comprar un coche es un gasto importante para la mayoría de la gente. Algunas personas intentan ahorrar a lo largo de varios años, mientras que otras piden préstamos. Todo el mundo quiere ahorrar dinero, pero no todo el mundo sabe cómo.
Hemos recopilado para ti diferentes opciones de cómo comprar un coche querido sin pagos excesivos.
1. Un buen momento para comprar
Los expertos aconsejan esperar hasta diciembre. Muchos concesionarios de automóviles ofrecerán promociones y programas de ayuda en estas fechas. Los concesionarios intentarán vender al máximo las existencias antiguas antes de que lleguen las nuevas. Para mejorar los informes, fomentan las ventas con importantes descuentos.
Pero hay un matiz: en la situación actual y la escasez resultante, esta estrategia puede no funcionar. Es decir, habrá promociones, pero debido al aumento de los precios no habrá ahorro. Puede que haya una buena oferta a final de mes o de trimestre. Pero solo si el fabricante ha aumentado los volúmenes de suministro.
2. Decidir el modelo
No es una buena decisión elegir solo por precio y no por características. Tienes que decidir el modelo antes de comprarlo. Puedes preguntar a expertos o a alguien con experiencia. Asegúrate de estudiar las características, comparar con los parámetros de otros coches, probar si es posible.
Si el concesionario se da cuenta de que no estás familiarizado con el tema y no sabes lo que quieres, te ofrecerá un modelo por el que obtendrá una gran prima. O el que peor se venda.
3. Competencia entre distribuidores
Si no tienes prisa por comprar, puedes intentar conseguir un gran descuento. Para ello, haz que tus concesionarios de distintos salones compitan entre sí. Por ejemplo, en la primera finge ser un comprador con intenciones serias: infórmate sobre los parámetros del coche, regatea.
Luego ir a otros concesionarios y repetir el mismo acto. Eso sí, no olvides mencionar casualmente los descuentos que te prometieron en lugares anteriores.
4. Presta atención al color del coche
Los coches más baratos son de tonos neutros. Si quieres ahorrar dinero, busca un modelo negro, blanco o gris. Los acabados metalizados o nacarados se sitúan en la gama media de precios. Costarán más que las versiones básicas.
Los coches con tonos exclusivos son los más caros. Si tienes intención de vender tu coche en el futuro, es posible que el gasto no se recupere.
5. Reservar el coche
Si el modelo que ha elegido tiene mucha demanda, tiene sentido asegurarse una reserva. De lo contrario, mientras usted está consultando con los gestores, las aseguradoras o el banco, alguien más rápido se lo robará delante de sus narices. Entonces tendrás que esperar a una nueva entrega. O aceptar un modelo similar, pero más caro.
Consejo: Si reservas un coche, elige un concesionario con buena reputación. Así podrás recuperar la fianza si cambias de opinión.
6. Comprar de segunda mano
Si realmente necesitas el coche y la compra se pospone indefinidamente por falta de fondos, tiene sentido buscar coches de segunda mano. No tienes que buscar una rareza de colección. Se pueden encontrar coches bastante decentes fabricados hace 2-3 años. Suelen venderse cuando se necesita dinero urgentemente.
El precio suele ser un 30-40% más bajo que en una sala de exposición. Así que tiene sentido buscar una opción similar.
7. Intercambio
Prepárate para el regateo si decides cambiar tu auto. Los vendedores de coches le pondrán un precio muy por debajo de su valor de mercado, para obtener más beneficios. No te conformes con la primera figura a la que le pongan voz. Aprovechar los puntos fuertes del coche. Si eres persuasivo y confías en ti mismo, puedes conseguir un precio aceptable.
Además, los concesionarios pueden ofrecerte un descuento adicional de su parte. Por lo tanto, no está de más encontrar de antemano a un empleado cumplidor que le ofrezca condiciones más favorables.
8. Elección del crédito
Cuando decidas pedir un préstamo a un banco, trata de entender todos los matices. El crédito se presenta en muchas formas y tamaños, cada uno con sus especificidades. A menudo, el tipo de interés de un préstamo para automóviles es ligeramente inferior al de un préstamo al consumo.
Pero en algunos casos, es este último tipo de préstamo el que resulta más ventajoso. Una vez elegida la mejor opción, lee atentamente las condiciones del acuerdo. Ocurre que después de redactar los papeles, el tipo de interés o el valor del coche resultan ser más altos de lo estipulado. En consecuencia, el coche se encarece.